En Kandy, la capital religiosa de la isla conocerá a su guía y a su Royal Enfield. Después de una breve explicación sobre seguridad, tomará la dirección de Nuwara Eliya pasando por las famosas 18 curvas hasta Mahiyanganaya. Desde el principio atravesará hermosos paisajes y, en particular, el santuario de Victoria Randenigala, al pie del macizo de los Knuckles, que es uno de los espacios protegidos más grandes de la isla. En su cómoda moto Royal Enfield, recorrerá uno de los mayores depósitos hidráulicos del país y quedará impresionado por esta obra de arte.

Continuará su descubrimiento de Sri Lanka en motocicleta hacia las tierras altas y la región de Nuwara Eliya. Plantaciones de té desfilarán delante de usted a medida que avanza. En el manillar de su moto, cara al viento, por caminos sinuosos y rodeados de paisajes impresionantes, sólo podrá sentirse privilegiado ante tanta belleza.

Al día siguiente se dirigirá hacia el sur para descubrir nuevos paisajes. A medida que los kilómetros se suceden usted observará un cambio de ambiente, la temperatura aumenta, la humedad disminuye y el verde, tan característico de la región de las plantaciones, deja paso a paisajes más áridos. Atravesará el Parque Nacional de Yala, donde viven numerosas especies de animales, entre ellos ciervos, cocodrilos, jabalíes, elefantes, búfalos de la India y una multitud de aves, pero también de majestuosos leopardos. ¡Si tiene suerte, podrá ver pavos reales o elefantes cruzando la carretera! Es en este decorado que terminará su pequeño circuito de motocicleta en Sri Lanka.